Las lesiones de menisco ocurren cuando los meniscos, que son estructuras de cartílago en la rodilla que amortiguan el impacto y estabilizan la articulación, sufren daño debido a giros bruscos, movimientos forzados o traumatismos directos. Son comunes en deportistas y personas que realizan actividades que implican cambios rápidos de dirección.
Causas comunes de las lesiones de menisco
- Movimientos de torsión bruscos con el pie fijo en el suelo
- Golpes o traumatismos directos en la rodilla
- Degeneración del cartílago por envejecimiento o uso excesivo
- Actividades de alto impacto como fútbol, básquetbol o correr en superficies duras
Síntomas de una lesión de menisco
- Dolor localizado en la parte interna o externa de la rodilla
- Inflamación y rigidez en la articulación
- Sensación de bloqueo o atrapamiento al mover la rodilla
- Dificultad para doblar o extender completamente la pierna
- Chasquidos o sensación de inestabilidad al caminar
Tratamiento y recuperación
El tratamiento depende de la gravedad de la lesión, pero la rehabilitación con un especialista en fisioterapia y recuperación articular es clave para evitar complicaciones.
- Método RICE (Reposo, Hielo, Compresión, Elevación) en las primeras 48 horas
- Ejercicios de fortalecimiento para estabilizar la rodilla
- Terapia física con técnicas de movilidad y reeducación articular
- Uso de rodilleras o vendajes para reducir la carga en la articulación
- Cirugía (artroscopia de rodilla) en casos de desgarros graves o bloqueo articular
Prevención de lesiones de menisco
- Realizar un calentamiento adecuado antes de hacer ejercicio
- Evitar movimientos de torsión bruscos sin estabilidad adecuada
- Fortalecer los músculos de las piernas para proteger la rodilla
- Usar calzado deportivo adecuado para absorber impactos
Si sientes dolor en la rodilla o sospechas una lesión de menisco, consulta con un fisioterapeuta para un diagnóstico preciso y tratamiento efectivo.
URGENCIAS: 24 HORAS
WhatsApp: +52 56 4000 3422